Muy bien lo dijo Carl Jung: “Todo lo que nos irrita de otros nos lleva a un entendimiento de nosotros mismos”. Reconocer que cada persona que conocemos se encuentra lidiando con sus propios problemas, mostrar empatía y ser bondadosos quizás sean las mejores formas de ayudar y comprender a la otra persona.
Hacernos responsables de lo que decimos y hacemos, mirando siempre el corazón de los demás, es transitar un camino que nos permite comprender los desafíos por los cuales cada quien atraviesa diariamente, así ganamos paciencia y aceptación. En algunas ocasiones perdemos la paciencia tratando de explicar nuestras ideas o puntos de vista a otras personas, pero estas simplemente no lo ven o no lo entienden. En esos casos nuestro ego no nos deja comprender que aunque esa persona no logre ver lo que nosotros sí, no es tonta, sino que simplemente es otra persona, con creencias e ideas diferentes. Es en esas situaciones que debemos fortalecernos y buscar comprender a los demás.
¿Qué hacer para lograr comprender a los otros? Aunque estas ideas puedan parecerte repetidas, míralas más bien como llaves que abren las puertas de la armonía, la comprensión y las relaciones efectivas.
- Hay que estar presentes, en el aquí y en el ahora.
- Bájale dos al volumen de tu ego o conversación interna.
- Aprende a reconocer y gestionar tus emociones.
- Reconoce las emociones de la otra persona.
- Valida a la otra persona.
- Permite que la otra persona también se exprese.
- Presta atención a la comunicación no verbal.
- Toma conciencia de lo que tú interpretas.
- Busca siempre validar lo que dice la otra persona.
- Pregunta para entender.
- Escucha con atención.
Albert Einstein dijo: “si quieres conocer a una persona, no escuches sus palabras, observa su comportamiento”. Por eso siempre debemos tomar en cuenta que somos completamente responsables de lo que hacemos, decimos y pensamos. En las relaciones efectivas no cabe la famosa frase “soy responsable de lo que digo, no de lo que interpretas”. Siempre es mejor buscar comprender que criticar al otro, y si es complicado para ti, toma en cuenta las sabias palabras de Lao Tsé: “comprender a los demás es sabio, comprenderse a uno mismo es estar iluminado”. ¿Qué queremos decir?, pues que siempre debemos comenzar por nosotros mismos, ponernos en los zapatos del otro y ser compasivos, no jueces.