En una de esas visitas que hacen convercerme más de la maravillosa oferta de alimentos que tiene el estado Mérida en Venezuela, me presentaron el chachafruto, también conocido como balu o habichuela. Un fruto que se caracteriza por su alto contenido de proteínas, minerales y fibra. Otra opción más para alimentarnos bien y comer rico.
Esta receta que hoy comparto me la dio una muy buena amiga, curiosa de las artes culinarias, con gran paladar. La hizo y le quedo deliciosa.
Para 4 personas
1 taza y media de chachafrutos pelados (tratando de tener siempre alternativas de sustitución probé con caraotas blancas y funcionó)
1 y 1/2 cucharada de pasta de ajonjoli
1 diente grande de ajo
2 cucharadas de aceite de oliva
3 cucharadas de jugo de limón
2 cucharaditas de ajonjolí tostado
Luego de pelar los chachafrutos los ponemos a hervir en agua con comino, hasta que estén blandos. En la licuadora ponemos las cucharadas de pasta de ajonjolí, aceite de oliva, diente de ajo, jugo de limón y los chachafrutos. Licuamos hasta formar una crema. Podemos agregar más aceite de oliva y limón si necesita estar más cremosa. Agregamos sal al gusto, el ajonjolí y refrigeramos por una hora. La podemos comer con casabe o pan. Yo personalmente me preparé una arepa vegana con el humus, rodajas de tomate, palmitos y alfalfa y ¡quedó suprema!